“La primera fotografía aérea”, tomada por James Wallace Black en 1860, es una imagen histórica en el ámbito de la fotografía. Se considera la primera fotografía aérea exitosa, capturada desde un globo. Titulada “Boston, como lo ven el águila y el ganso salvaje”, la fotografía ofrece una impresionante vista en picado de Boston, Massachusetts.
Esta obra innovadora marcó un avance significativo en las técnicas fotográficas y abrió nuevas posibilidades para capturar paisajes desde el aire. La imagen no solo muestra la disposición urbana de Boston en esa época, sino que también resalta el potencial creciente de la fotografía aérea en el arte y la documentación. Los esfuerzos pioneros de Black sentaron las bases para futuros desarrollos en la imagen aérea, que eventualmente desempeñarían roles cruciales en campos como la cartografía, la vigilancia e incluso la reconnaissance militar.